Italia, constituye uno de los destinos principales para la inmigración latina, países como Perú, Ecuador, Brasil, República Dominicana, Cuba, El Salvador y Colombia se encuentran dentro del listado de ciudadanos extranjeros con mayores habitantes residentes | legalmente en este país europeo, dando lugar a relevantes consecuencias en el plano social, económico y demográfico. Según los datos del Instituto Nacional de Esta- dística Italiano (Istat), hasta el 1 de enero del 2023 existen en el territorio, 5 millones 141 mil| 341 extranjeros, de los cuales, 98 mil 733 son proveniente de Perú, seguidos por 63 mil 211 de Ecuador y 51 mil 125 de Brasil. En el caso de República Dominicana, los dominicanos son la cuarta población de latinos residen- tes legalmente en territorio italiano, con un total de 29 mil 57 ciudadanos, continuando por los cubanos, quienes eligen a Italia como el tercer país de destino y cuentan con 23 mil| 531 nacionales que viven esta nación.
Dentro de los resultados del censo permanente de población, también figuran los salvadoreños
con 22 mil 693 y los colombianos con 20 mil 856 nacionales. Y en todos los países antes mencionados la mayoría son mujeres, ocupando un mayor porcentaje con relación a los hombres. Estas cifras, dadas a conocer por el Instituto Nacional| de Estadística Italiano, se obtuvieron considerando a las personas de ciudadanía no italiana con residencia habitual en el país, lo que quiere decir que estos números podrían ser mayores si consideramos la diáspora latina que ya ha adquirido la nacionalidad italiana. Para la economía italiana este importante segmento de la población tiene un gran impacto, la nación cuenta hasta el 2023 con 2,4 millones de trabajadores extranjeros, quienes producen 154,3 mil millones de euros de valor agregado, con una contribución al Producto Interno Bruto (PIB) del 9,0 por ciento, de acuerdo al informe de la Fundación italiana Leone Moressa, especializada en el estudio de las fenomenologías y problemas relacionados con la presencia extranjera en el territorio. La diáspora latina, en otros aspectos, sin lugar a duda, permite que la sociedad italiana se enriquezca y evolucione a través de los aportes que realizan con sus culturas, ideas y habilidades diferentes.